Siguiendo con la explicación sobre el proceso que sigue la energía en las diversas series del tarot nos encontramos con los nueves, los cuales están relacionados tanto con el Ermitaño como con el Sol. Estas atribuciones son muy interesantes ya que por un lado hablan de un alejamiento, y también la posibilidad de iniciar nuevos proyectos. Lo anterior es muy lógico si pensamos que después de la estabilidad o perfección de los ochos, se de un paso más allá para apartarse del camino, tal vez entrando en un momento de crisis como el Ermitaño. Proceso que nos llevará a un buen lugar, en este caso El sol.
De esta manera la energía de los nueves es de alguna manera dual, por un lado nos arroja a veces hacia el reconocimiento del camino recorrido, también al alejamiento pero a su vez nos lleva a pensar en nuevas posibilidades o manifestaciones de la energía del palo en cuestión.
Finalmente en el árbol de la vida, la atribución de los nueves es para la sefirá de Yesod, misma que esta un paso de la manifestación, con lo cual las correspondencias con el análisis que hemos hecho hasta ahora se complementan.
Con esto termino la entrada de hoy, espero estas explicaciones les estén siendo útiles. Les deseo mucha luz y sabiduría.
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